"Exactamente, ¿Qué es un APOSTOL?"

Capítulo 11

Volver al Sendero

Como hemos visto en el capítulo anterior, hay una urgente necesidad de "volver al Sendero" - regresar definitivamente otra vez plenamente a la herencia espiritual y al "Camino de Dios" - Pero, ¿Cómo? ¿Qué implica esto específicamente? ¿Qué está involucrado, al interior nuestro, en "Volver al Sendero" - más que un abrazamiento nebuloso de cualquier cosa que nosotros personalmente podamos percibir como "El Camino"?

Pero, el Sr. Armstrong "Hizo Cosas Erróneas"

Una de las excusas más comunes que la gente usa para justificar el rechazo de áreas específicas que el Sr. Armstrong trató, es que "el cometió errores". De hecho, el Sr. Armstrong sería el primero en admitir que él era humano y, en consecuencia, cometía errores - como pasó con Pedro, Santiago, Juan, Mateo, Pablo, y los otros apóstoles del Nuevo Testamento.

Pablo y Bernabé tuvieron un ardiente cruce de argumentos sobre Juan Marcos (Hechos 15:39). El apóstol Pedro tuvo que ser abiertamente corregido por Pablo, por su forma de tratar a los Gentiles (Gálatas 2:11-13). El apóstol Pablo estuvo en un tiempo con la expectativa plena de estar vivo físicamente al regreso de Cristo (I Tesalonicenses 4:15, 17). En cada caso, Dios nos está enseñando. No sólo nos está mostrando que los apóstoles cometen errores, sino que tales "errores", de ninguna manera desligan la naturaleza apostólica de sus escritos, ni ponen en riesgo, de alguna manera, el liderazgo de Aquel que está realmente guiando la Iglesia ¡Jesucristo!. Aunque Cristo escoge trabajar a través de frágiles apóstoles humanos para poner los fundamentos, y escoge trabajar de continuo por medio de ellos para preservar aquellos fundamentos, El no comete errores con su Iglesia.

Aquellos que intentan usar los "errores" pasados como su excusa, invariablemente hacen eso en razón de que ellos tienen su propia agenda. Recuerdo que se me preguntó, en este contexto, si yo estaba de acuerdo con la declaración: "Nos reservamos el derecho de revisar continuamente y de cambiar alguna de nuestras doctrinas que no estén alineadas con las escrituras." Mi réplica fue simplemente: "¿quién es nosotros?" Ellos no tuvieron respuesta efectiva. Quien quiera que pueda ser "nosotros", ellos no tienen absolutamente ningún derecho de cambiar la revelación apostólica (I Corintios 3:11).

Espero que por medio de este punto abordado en este folleto, podamos claramente ver que, asumir un papel apostólico por nosotros mismos, o intentar tomar para nosotros mismos una gracia que Dios no ha dado, nos pone en oposición a la dirección y propósito de Dios. No obstante, esto todavía deja la pregunta: ¿Cuáles porciones de material producido por el Sr. Armstrong ha preparado Cristo para nosotros, que usemos hoy para "volver al Sendero," en relación con temas específicos?

Aprender De "La Carrera de Prueba"

Afortunadamente, nuestro amoroso Dios ha provisto precisa instrucción sobre cómo debemos proceder en relación con las cosas "específicas". Él hizo esto durante un tiempo único - de 1978 a 1985 - cuando Él trajo de regreso a su apóstol del tiempo del fin, de un infarto total, a poner a la Iglesia "De regreso al Sendero", en una especie de "carrera de prueba". De lo que la Iglesia tenía que recuperarse en ese tiempo, era de la condición "Laodicea" casi idéntica a la que vemos alrededor de nosotros ahora. Para aquellos con ojos para ver, la mano de Dios estaba entonces - y está hoy - firmemente en el timón. Observe qué fue dicho en uno de los sermones primeros sobre "Regreso al Sendero" que el Sr. Armstrong dio después de su regreso a Pasadena, de Tucson:

"He convocado a un día especial de oración y ayuno hoy, porque ¡la Iglesia de Dios está en PELIGRO FATAL! No puedo decir eso suficientemente alto para martillarlo efectivamente en ustedes."

"NO NOS DAMOS CUENTA, hermanos míos, de la forma en que hemos sido desviados. Hemos estado haciendo justo lo que ustedes oyeron en el sermoncillo - haciendo nuestras propias cosas. Nos hemos estado volviendo tibios… Preferiría que hubiera dos o tres personas llenas del Espíritu del Dios Viviente, que tener esta iglesia repleta y mil otras iglesias como ésta, de gente tibia - volviéndose a la condición Laodicea - haciendo sus propias cosas." ("Advertencia a la Iglesia," 24 de Junio, 1978)

Note que el problema que el Sr. Armstrong resalta arriba es "haciendo nuestras propias cosas." Este es el mismo significado de la palabra "Laodicea". Dios permitió que el Sr. Armstrong atestiguara esta condición, no solamente dentro de la Iglesia, sino también dentro del liderazgo, del ministerio, del Colegio Universitario, y del equipo de los medios de comunicación. Observe este segmento de carta que él tuvo que escribir a su propio hijo, señalando su parte en permitir que la Obra se pusiera progresivamente "fuera del Carril":

"La Obra… fue hecha de una MANERA distinta, como ninguna en este mundo - fue CRISTO haciéndolo A SU MANERA - y no a la manera en que los hombres lo hacen…"

"En su debido tiempo, usted, hijo mío, entró en la Obra. Sin embargo, desafortunadamente usted NO ESTUVO DE ACUERDO con la MANERA en que Jesucristo había estado dirigiéndome…"

"Al principio, Ud. siguió el mismo estilo al aire [haciendo los programas de radiodifusión y televisivos] que Cristo había usado en mí -totalmente DIFERENTE de LA MANERA como solían hacerlo los "expertos" de las difusiones comerciales… Entonces usted cambió en su forma de discursar. Usted copió de los programas de difusión comerciales…"

"Usted no estuvo de acuerdo con LA FORMA en la cual Cristo estuvo construyendo el colegio y la Obra a través de mí. Asimismo, Ud. dijo a otros que usted no habría construido el colegio de LA MANERA en que lo hice bajo la guía de Cristo…"

"Usted comenzó cambiando LAS MANERAS y a todo el personal, a SU MANERA. Y, aunque Ud. no estará de acuerdo conmigo en esto, como Ud. no ha de estar de acuerdo en LA MANERA en que las cosas deben ser hechas, la Obra empezó a declinar. No obstante, me han dicho que usted reclamó haber CONSTRUIDO LA OBRA."

"Sin embargo, el CRISTO viviente la construyó. Y Él la construyó en LA MANERA en que Él me lideró: LA MANERA con la que usted no está de acuerdo." (Citado de Carta a colaboradores, del 21 de mayo, 1978)

Para que la Obra "volviera al Sendero", el Sr. Armstrong tenía que retornar cada área de la misma, de regreso a "La Manera" en que Cristo le había anteriormente mostrado. Él hizo esto en etapas. Espero que podamos ver, por consiguiente, que "La Manera" no es algo nebuloso. La razón por la que la Obra llegó a estar "fuera del Sendero", fue porque aspectos de "Esta Manera", ya no estaban fielmente adheridos a "como se enseñó" (Colosenses 2:7; Tito 1:9).

Un Punto de Inicio

Si deseamos personalmente "volver al Sendero", un excelente lugar para iniciar es, por una vez más, leer El Misterio de los Siglos. Pero, esta vez - cuando entendemos más acerca del apostolado - nuestro enfoque debe ser diferente. Cualquiera que sea el papel dentro de la Iglesia, no tenemos la gracia dada a un apóstol. No es el Sr. Armstrong el que nos ha dejado la herencia espiritual en El Misterio de los Siglos y su otro material. Es la Cabeza de la Iglesia - Jesucristo - ¡cuando Él lidera Su Iglesia del tiempo del fin hacia su posición dentro de Su Templo y con Su esposo!

El hecho de que Cristo elija hablar a través de un frágil instrumento humano - su apóstol del tiempo del fin, con todas sus fallas - no tiene ningún significado relevante en relación con lo que es la Verdadera Fuente. La posición de tales enseñanzas es en realidad la misma, como los escritos no canonizados de Pablo o Pedro, o escritos escriturales previos a la canonización. El enfoque que Cristo habría demandado en el pasado, respecto de tal material no canonizado de Pedro y de Pablo, habría todavía incluido ¡un respeto hacia su naturaleza apostólica! Así que los escritos de nuestro apóstol - enviado por Dios en este tiempo del fin, justo antes del retorno de Jesucristo - ¡requiere el mismo respeto. El Misterio de los Siglos es en realidad un escrito apostólico - aunque no esté canonizado.

Lea la "Declaración del Autor" y tenga en mente exactamente por qué El Misterio de los Siglos fue escrito, y por qué Satanás efectuó su mejor esfuerzo por suprimir esta explicación del "mensaje cifrado de Dios, quien no permitió que el mensaje se revelara ni se descifrara hasta nuestro tiempo" (pág. xiii). Aprecie que, de hecho: "el tiempo puede probar que éste ha de ser el más importante libro escrito en casi 1,900 años" (pág. xiii), y que "el tiempo designado por Dios para que saliera a la luz ha llegado" (pág. xiv).

Dése cuenta de cómo justamente el apóstol Pedro dijo: "… yo procuraré con diligencia que después de mi partida vosotros podáis en todo momento tener memoria de estas cosas" (II Pedro 1:15); asimismo, nuestro apóstol nos dice:"Y ahora, a los 93 años de edad, he sido inspirado a escribir este libro antes de que esta vida, colmada de experiencias, llegue a su fin. En sus páginas comparto, con todos los que quieran saber, las respuestas que la gran mente suprema de Dios revela en su Palabra" (pág. xiv). Dése cuenta también de que, justo antes de este párrafo, el Sr. Armstrong hace muy claro en realidad que, los únicos habilitados para entender serán los de la Iglesia Verdadera de Dios - ¡y no alguna otra!- El Misterio de los Siglos ha sido escrito específicamente para aquellos futuros maestros, para que ellos puedan entender completamente "El Camino" [La Manera] en que ellos están destinados a enseñar.

El Asunto del Pecado

Al estudiar esta riqueza de material, una cosa debería constantemente venir al frente: "El Camino", que, como hemos visto en el capítulo anterior, es espiritual. Cuando "volvemos al Sendero" debemos aprender, de los escritos del Sr. Armstrong, a aplicar el principio de la palabra de Dios, apropiadamente. Debemos hacer eso de una manera honesta, abierta y humilde - no "manipulando la Palabra de Dios engañosamente" (II Corintios 4:2), como tantos están haciendo hoy.

Si intentáramos torcer "El Camino" hacia "nuestra propia manera", seremos inadecuados para aplicarlo apropiadamente en el Reino de Dios. Aplicando el principio clara y firmemente - no simplemente la letra - es como exactamente fuimos enseñados a "volver al Sendero" en los 70's y 80's. Tome nota de cómo el Sr. Armstrong hace esto en el siguiente Reporte General del Pastor, en 1983, enviado al ministerio, concerniente al tema del maquillaje:

"Antes de examinar textos específicos sobre el tema del maquillaje, permítanme resumir el PRINCIPIO involucrado, no solo sobre el maquillaje sino sobre cualquiera o todos los temas de lo que es correcto y de lo que es equivocado.

La ley de Dios define el CAMINO de la conducta humana; primero que todo, en relación con Dios, y, secundariamente, con el vecino humano. LEY significa simplemente las reglas de conducta. Las REGLAS de un juego de básquetbol, béisbol, o fútbol, podrían ser llamadas la LEYES de esos juegos - las reglas que regulan la ejecución.

La LEY de Dios está declarada en una palabra: AMOR. La palabra AMOR es un PRINCIPIO, y en principio es opuesto a la palabra CODICIA. Es decir, AMOR hacia otros. Primero que todo, AMOR hacia DIOS, en amor, adoración y obediencia. Secundariamente, es amor hacia otros seres humanos. No puede ser vanidad, porque la vanidad es hacia sí mismo, y pone el SÍ MISMO antes que Dios. Amor hacia Dios, y el culto de Dios, en sí mismo, es el PRINCIPIO de humildad, no de auto-exaltación o vanidad o codicia. Es amor hacia el vecino, en espíritu de INTERÉS exterior por el bienestar del vecino - en cooperación, servicio, asistencia, participación. También puede ser amor hacia sí mismo, en el sentido o principio del interés por el bienestar físico y mental y espiritual de cuerpo y mente, lo cual constituye el templo del Santo Espíritu de Dios.

USTEDES PUEDEN APLICAR ESE PRINCIPIO A CUALQUIER ASUNTO DE CONDUCTA HUMANA. Esta es la respuesta real al asunto del PECADO.

Mientras escribo y PIENSO en este tema, estoy convencido de que pocos entienden la VERDAD - aún en la verdadera Iglesia de Dios - sobre este asunto del PECADO.

Una gran parte del Protestantismo ha dejado marca sobre nuestra gente en la Iglesia de Dios. Ni Católicos ni Protestantes enseñan los Mandamientos de Dios. Preferiblemente, ellos enseñan que la ley fue abolida. Si no hay ley, entonces no hay pecado, "porque donde no hay ley, no hay trasgresión," (Romanos 5:13) y "pecado ES la trasgresión de la ley" (I Juan 3:4). Pero la ley de Dios es ESPIRITUAL (Romanos 7:14).

Dios mira al corazón. Mas, "el corazón", como es usado en el sentido Bíblico, se refiere a la actitud, al intento o propósito. El pecado resulta de una actitud, intento y deseo, equivocados, los cuales son una actitud de mente. No obstante, el pecado es también un acto. Es el acto de rendirse a una actitud, deseo o propósito contrario al AMOR hacia Dios o hacia los seres humanos. La vanidad viola el "amor hacia Dios y el culto de Dios". Es deseo o intento o actitud de AUTO glorificación. AUTO deseos para glorificarse así mismo, no a Dios. La VANIDAD es la raíz del PECADO.

Hermanos, este mes entraré al año 92 de mi vida en este siglo. Tengo que darme cuenta de que estoy solamente a un latido del final de esta vida. Por su amor, y el amor a su Obra, espero que Dios me permita más continuados latidos. Sin embargo, tengo que mirar al estado de la Iglesia de Dios realistamente. Pienso que veo estas cosas más sobriamente que anteriormente - quizás más sobriamente que muchos de ustedes.

Pregúntese, "¿Realmente tengo hambre y sed de la justicia de Dios?" o, hambre y sed de ser como el mundo, cuyo dios es Satanás?

¿Cuántos son como la mujer que había sido bautizada sólo unos cuantos meses y vino a mí, diciendo: "cabo de heredar algún dinero. Dígame, ¿cuánto tengo que diezmar de ello a Dios? Yo no quiero diezmar nada más que lo que tenga que diezmar, aunque quiero entrar en el Reino de Dios?"

¿Tiene USTED hambre y sed de la justicia de Dios, o de los caminos de este mundo? ¿Está usted interesado en lo que DIOS piensa de usted, o en lo que el mundo piensa de usted? -¿EN CUÁL?" (Reporte del Pastor General, Vol.5, No.26, Julio 1, 1983).

Dos Tipos de Error

No hay duda ninguna de que el artículo completo, parcialmente citado arriba, clara y firmemente, muestra que el maquillaje no puede formar parte de "El Camino" que caminamos. Esto es simplemente un ejemplo escogido, porque trata lo más sucintamente el asunto del pecado; pero tales conclusiones establecen dos puntos verdaderos en lo que hemos de seguir hoy, y en lo que debemos enseñar mañana. El maquillaje es incompatible espiritualmente. Más, dentro de las corporaciones de las Iglesias de Dios hoy, ¿qué encontramos en relación con reglas específicas tales como ésta? -reglas originalmente hechas por Dios, a través de Su apóstol, quien estaba siendo dirigido por Su Espíritu- para mostrar a Su pueblo cómo "volver al Sendero" en el mundo moderno?

Lo que ampliamente encontramos son dos enfoques desplegados a lo largo de cientos de diferentes grupos corporativos, y ambos enfoques están "fuera del Sendero": El más común, escandalosamente rechaza el liderazgo de Cristo, y, en su lugar, asume una gracia, reservada específicamente para los apóstoles. Ellos deciden que el Sr. Armstrong estuvo equivocado en varios asuntos, y toman para sí mismos el conocimiento de lo correcto y lo equivocado, en cualesquiera áreas que ellos deciden re-examinar. ¡Casi que llevan con orgullo el distintivo Laodiceo: "la gente que juzga y decide."!

El otro enfoque, sin embargo, parece ser, exteriormente, más justo. Ellos intentan mantener eso, porque han agregado el maquillaje (o algún otro punto) a la lista de aprobaciones y desaprobaciones" que ellos han compilado. Esto los hace justos. Frecuentemente usted también podría tener la impresión de que este grupo siempre ha estado correcto, y que ellos siempre han estado "en el Sendero". Tal enfoque dentro del ser humano nunca es el Camino de Dios, y no es "El Camino" que recibimos, por vía del Sr. Armstrong, como nuestra herencia espiritual. Ciertamente, "pecado ES la trasgresión de la ley" (I Juan 3:4), pero, como el Sr. Armstrong lo indica en lo citado arriba: "la ley de Dios es ESPIRITUAL;"y el apóstol Pablo continúa diciendo: "mas yo soy carnal, vendido al pecado" (Romanos 7:14).

El Sendero al cual hemos de retornar no es un destino. Es un "Camino" - una ruta sobre la cual todos debemos caminar. "Volver al Sendero" es, por lo tanto, un proceso: De alinear absolutamente todo lo que hacemos, pensamos o decimos, con la divina naturaleza de Dios. En un ser humano, el Verdadero "Camino" de Dios consiste en un estilo de vida de constante arrepentimiento.

El Propósito de Reglas y Ley

El Sr. Armstrong explica que, "LEY simplemente significa, las reglas de conducta. Las REGLAS de un juego de basquetbol, béisbol, o fútbol, podrían ser llamadas las LEYES de esos juegos -las reglas que regulan la ejecución-" (Reporte del Pastor General, Vol.5, No.26, Julio 1, 1983). Al usar esta analogía del basquetbol, podemos ver que las leyes del basquetbol indican cuándo no estamos jugando el juego; sin embargo, ¡ellas no nos hacen buenos jugadores de basquetbol!

De la misma forma, las Leyes específicas de Dios, y las reglas apostólicas, son ambas, hechas para el mundo moderno en el tiempo del fin, a través del apóstol, y son diseñadas, igualmente, para indicar cuándo vamos FUERA del Sendero (el significado de pecado es "perder la huella" espiritualmente). ¡Pero ellas no nos hacen justos! Ellas no nos ponen de nuevo EN el Sendero. Podemos guardar cualquier "lista de cosas" que decidamos acopiar, y, todavía, estar totalmente fuera del Sendero -como lo estuvieron los Fariseos-. Estar en el Sendero es una acción que proviene solamente del Espíritu de Dios, porque son únicamente aquellos que "son guiados por el Espíritu de Dios … [quienes] son hijos de Dios" (Romanos 8:14).

Este punto, vitalmente importante, es reforzado en Romanos, cuando nos dice que "por las obras de la ley ningún ser humano será justificado delante de él; porque, por medio de la ley es el CONOCIMIENTO del pecado" (Romanos 3:20). La ley nos indica, CUÁNDO pecamos, que estamos fuera del Sendero. Ésta no nos REGRESA a la posesión del Carácter de Dios ¡¡NO nos hace justos! La justicia solamente puede venir de Dios; debe ser justicia de Dios; no, la nuestra (versículos 21-22). Esta es la razón por la cual esto implica constante contacto con Dios - soliendo hacer estudio, meditación, oración y ayuno - si hemos de ser exitosos.

Esto es también cierto en relación con cualesquiera reglas apostólicas hechas por el Sr. Armstrong. Cualesquiera reglas que hoy tengamos - dejadas por el apóstol del tiempo del fin - nos muestran cuándo estamos "Por fuera del Sendero" en nuestro mundo moderno. Estamos por lo tanto obligados por deber a adherirnos a ellas. No obstante, guardarlas no nos pone de regreso en el Sendero. Eso implica aún la conversión de nuestro ser interior - nuestro corazón - por el Espíritu de Dios. Esta es la razón por la que el Sr. Armstrong señaló: "Esa ley es amor. pero no amor humano. El amor humano no puede elevarse sobre el nivel del egocentrismo humano. Debe ser "el amor de Dios ...derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo" (Romanos 5:5) (El Misterio de los Siglos, Capítulo 6, pág. 226).

Espero que podamos ahora ver precisamente por qué necesitábamos un apóstol del tiempo del fin. Necesitábamos ser enseñados por Dios en cómo aplicar "El Camino" en nuestros siglos 20 y 21. Este Camino - este gobierno - representa "todas las cosas" que fueron restauradas para la Iglesia de Dios. Es lo que específicamente necesitábamos en este tiempo para entrenarnos en cómo funcionar como hijos de Dios dentro del Reino de Dios. Esta es la razón por la cual es tan vital para nosotros en este tiempo crucial en la historia, ¡ESCUCHAR otra vez la enseñanza espiritual que Cristo nos dejó! ¡A no ser que lo entendamos plenamente dentro de la sociedad de hoy, tampoco seremos capaces de enseñarla en la sociedad futura; y Dios, por consiguiente, no nos permitirá ser uno de aquellos futuros maestros!

En este tiempo - justo antes del regreso de Cristo - debemos regresar y escuchar los sermones que dio el Sr. Armstrong durante 1978-1985, y estudiar la Palabra de Dios a la luz - bajo la iluminación - de ellos. Si Ud. no lo ha hecho por algún tiempo, le puedo garantizar que será asombrado por el aliento y lo profundo de la Verdad. Debemos también leer los artículos que el apóstol de Dios escribió en ese tiempo, a la par con humilde y meditativo estudio Bíblico. Únicamente cuando estamos plenamente sumisos al pleno gobierno de Dios (el cual es "El Camino" de Dios), puede Dios efectivamente prepararnos para su Reino - listos para enseñar, correctamente, ese idéntico "Camino", cuando Cristo regrese.

Ministros Fieles

Como hemos visto en el capítulo 5, gracia específica es dada junto con cada oficio ministerial que Dios ha establecido dentro de su Iglesia. A causa de que tales ministros son los verdaderos siervos -o ministros- de Dios, debemos, en realidad, "tenerlos en mucha estima," (I Tesalonicenses 5:13) como el apóstol Pablo nos manda. Esta es la causa por la que ellos enseñan como representantes de Dios Mismo.

Sin embargo, únicamente deberíamos aceptar la enseñanza de tales hombres, si aquellos hombres están, claramente y sin ambigüedad, alineados con los fundamentos puestos por Dios. El apóstol Pablo demuestra esto en I Corintios:"Conforme a la gracia de Dios que me ha sido dada, yo como perito arquitecto puse el fundamento, y otro edifica encima; pero cada uno mire cómo sobreedifica" (I Corintios 3:10).

Un ministro debe ser un administrador fiel (I Corintios 4:2), que cuidadosamente alinea sus palabras con aquellas del apóstol enviado a nosotros. Ellos deben ser como Timoteo: "…fiel en el Señor, el cual os recordará mi proceder en Cristo" (I Corintios 4:17). Como hemos visto, Dios escoge revelar Verdad fundamental únicamente a los apóstoles - no al ministerio general-. Por ejemplo, ¡la doctrina no puede introducirse en la Verdadera Iglesia de Dios, por vía de un comité doctrinal! Advierta lo que Dios claramente revela en conexión con esta área, a través de su apóstol del tiempo del fin:

"… Y algunos de nuestros intelectuales van a quemarse con esto, si no despiertan a tiempo y si no se dan cuenta de que ese intelectualismo es de Satanás el Diablo. Déjenme explicar un instante acerca de eso, antes de que continúe con el sermón principal. Este tipo de intelectualismo y erudicionismo - todos ellos quieren ser eruditos - es 100% carnal. Es material y es materialismo. No hay nada de Dios; nada de Cristo en esto. Es un intelectualismo que lanza a Cristo directo por la ventana. Y eso ha sido como levadura introduciéndose en el Colegio Ambassador…

Tuvimos aquí un comité doctrinal de intelectuales. Y toda la idea fue "probemos y estudiemos intelectualmente para encontrar cuan equivocado está el Sr. Armstrong y a dónde nos está desviando" Ese fue el objetivo real. Bien: Tal comité no existe más y no volverá. Dios no revela su Voluntad a eruditos conectados en una base intelectual, que se inmiscuyen en formas muy diminutas" ("Advertencia a la Iglesia", Sermón por el Sr. Armstrong, dado el 24 de Junio de 1978).

La Lista Parece Interminable

Podríamos proseguir en gran extensión con la guía apostólica que nos indujo de regreso "Al Camino" de Dios, dentro de nuestro mundo moderno, sobre temas como: Sanidad, médicos, votar, el pecado físico, nacer de nuevo, el evangelio, "Ese Profeta", matrimonio interracial, el pueblo de Israel físico, el calendario, maquillaje, cumpleaños, cómo nos bautizamos, la crianza de los niños, leyes de salud, traje de Sábado, los himnos que cantamos, hacer las publicaciones "Claras" -¿o ensombrecerlas con suavidad? La lista parece interminable.

Estamos en "Peligro Fatal" hoy, como el Sr. Armstrong lo gritó a nosotros en 1978. En realidad, existen "hombres" intentando tomar nuestra corona (Apocalipsis 3:11). Aquellos que intentan echar abajo "el Camino" que ya ha sido revelado a nosotros en este tiempo del fin, se hacen así mismos "lobos rapaces… que hablan cosas perversas" (Hechos 20:29-30) y se convierten en "falsos apóstoles"(II Corintios 11:13).

Tales hombres son como los Fariseos de la antigüedad que Cristo acorraló. A ellos se les pidió responder: "El bautismo de Juan [tipo del apóstol del tiempo del fin], ¿era del cielo, o de los hombres? …respondiendo, dijeron a Jesús: No sabemos" (Marcos 11:30, 33). Estos hipócritas eran felices de usar a Juan cuando les convenía (Mateo 3:7), pero aquí, clamaron que ninguno podría responder, si es que fue Dios el que ENVIÓ a Juan el Bautista; si fueran a admitir lo que era claramente evidente: Ellos conocían la siguiente pregunta de Cristo: "Por qué, pues, no le creísteis" (Marcos 11:31). Hoy vemos líderes dentro de las mismas Iglesias de Dios corporativas comportándose exactamente de la misma manera. ¡Ellos ofrecen servicio de labios al Sr. Armstrong, pero dan una idéntica respuesta Farisaica, en relación con su papel profetizado del tiempo del fin!

La Iglesia de Dios debe tener unidad - no facciones - y existe únicamente un "Camino". No puede existir "un apóstol" que viene después de la iluminación inicial, que echa abajo la revelación previa. En tal caso, la información de alguien no está viniendo por vía de revelación. Si reconocemos que Dios usó al individuo original en una forma sin precedentes, y que él entendió las cosas que nos traspasó debido a revelación, entonces, la única conclusión es que aquellos que intentan echar abajo esa revelación son falsos. Sin embargo, ellos pronunciarán muchas "suaves palabras y lisonjas," indudablemente (Romanos 16:18).

Nuestro amoroso Dios ha mostrado a cada uno de nosotros cómo lograr "Volver al Sendero". De otro lado, el Sendero al que debemos volver es espiritual; éste, es el "Camino" de Dios que debemos aprender, y al que debemos adherir por la eternidad.

Pero también, nos ha sido dados precisos indicadores que específicamente nos muestran dónde estamos "fuera del Sendero" en este mundo moderno. Tales indicadores deben ser aceptados por lo que ellos son: La única moderna administración apostólica del Gobierno de Dios disponible a nosotros. Ellos nos señalan de nuevo el "Camino" espiritual de Dios. Ellos nos indican cómo "Volver al Sendero".

En Resumen

La Iglesia llegó a estar "fuera del Sendero" a mediados de los años 1970s, cuando todos comenzamos a "hacer nuestras propias cosas". Esto fue cierto, desde arriba hasta la base de la organización humana, y parece que fue permitido por Dios por una razón específica: Le permitió a Dios guiar al Sr. Armstrong en la manera como él "regresó" la organización "al Sendero" , en ese tiempo - casi como una "carrera de prueba" de lo que debemos hacer hoy.

El material escrito en aquel tiempo (1978-1985) está disponible hoy. Ese material también permitirá a Dios guiarnos hoy correctamente "de regreso al Sendero", exactamente como se hizo originalmente. Debemos reconocer y apreciar que la Verdadera Fuente fue Jesucristo, quien continúa entonces - y ahora - en liderar a su Iglesia. El Misterio de los Siglos y otro material escrito por el Sr. Armstrong, desde ese tiempo, debería ser reconocido por lo que realmente son: Escritos apostólicos no canonizados. Tal material, señala dónde estamos fuera del sendero, y también indica la dirección que deberíamos seguir una vez más, desde nuestra moderna perspectiva del tiempo del fin.

Cualquier ministro involucrado en ayudarnos en este proceso debe, él mismo, estar claramente y sin ambigüedad alineado con la herencia espiritual que está sobre él. Únicamente tales hombres verdaderamente fieles deberían ser considerados como parte del Gobierno genuino de Dios. Todos los otros que sean desobedientes a esa herencia se hacen así mismos "lobos rapaces… que hablan cosas perversas," (Hechos 20:29-30) como "falsos apóstoles" (II Corintios 11:13); y deberían ser evitados por el Verdadero pueblo de Dios (Romanos 16:17).